Hace ya un tiempo que las musas no hacen acto de presencia y sus visitas a mi mente son cada vez más infrecuentes. La inspiración para escribir historias, ya sean de amor, de humor, de terror, o lo que se tercie, brilla por su ausencia. En lugar de ello, mis últimas entradas son una especie de queja continua. Son, también las más personales. Y no sé si debo seguir por ahí. Por eso hoy vengo a pediros un favor. Quiero que me deis vuestra opinión. Sincera. Sin recelos ni pudor.
Desde el principio he dicho que este blog no tenía un estilo definido. Los que me leéis desde hace tiempo lo sabéis. Era un batiburrillo donde se mezclaba realidad con ficción y donde ni yo misma sabía sobre lo que iba a escribir. Y sigo así. La esencia sigue siendo la misma, pero siento que mi estado de ánimo de los últimos meses hace que el blog pierda frescura, naturalidad y diversión. Siento que aburro con mis lamentos. Es cierto que lo que escribo últimamente es cómo me siento. Y utilizo el blog precisamente como vía de escape, para purgar el dolor. Pero quizá eso no le interese al lector. Yo misma me harto de mis entradas tristes, pero no puedo evitar soltar de vez en cuando lo que me pasa por la cabeza (y por el alma y el corazón) para que no se me enquiste. Es una forma de liberarme. Pero sigo sin saber si es la adecuada.
Cuando le diagnosticaron el cáncer a mi pareja, comencé a escribir sobre ello en una libreta. Mi intención era poner sobre papel todo lo que ocurriría a partir de ese momento, contar nuestra experiencia, cómo se sentía él, cómo me sentía yo. Dejar testimonio de todo ese proceso para que, una vez curado, pudiésemos leerlo o incluso pudiese servirle de ayuda a alguien en una situación similar. Contar cada visita al oncólogo, cada sesión de quimioterapia. Cada miedo, cada paso, cada alegría, cada decepción… Pero no lo hice. Después de la segunda visita al oncólogo, la libreta quedó apalancada. Supongo que estaba demasiado ocupada en vivir lo que estaba viviendo y no me sentí con fuerzas para escribirlo. Ahora me arrepiento.
Por eso hoy os propongo que me digáis lo que pensáis al respecto. Si os aburre mucho mi soliloquio, mis misivas a alguien que ya no está y ese cariz que está adquiriendo el blog. Quiero que me digáis si empezáis a perder el interés por leer lo que publico en este espacio. Si echáis de menos los relatos con ese punto divertido o desconcertante. Incluso me gustaría que me dieseis ideas, que me digáis lo que os apetece leer; algo sobre lo que os gustaría que escribiese. A ver si así consigo que vuelva a mí la inspiración.
No os cortéis en decir lo que penséis. Incluso podéis echarme la bronca o decirme a la cara que me estoy volviendo un coñazo (yo misma empiezo a sentirme así). No prometo volverme de pronto la alegría de la huerta, ni que no vaya a seguir escribiendo cosas tristes. Pero quiero volver a ilusionarme con el blog (y con la vida). Y quiero que me ayudéis.
Hoy, más que nunca, espero vuestros comentarios. Vosotros me leéis, yo os escucho…
Hola querida amiga, gracias por compartir tus emociones y tus preciosos escritos con nosotros bloggers. Me encanta tu blog desde que te conozco. Escribe siempre lo que sientes en tu corazón, siempre estaré cerca de ti. Realmente te admiro por todo, eres maravillosa, te mando mucho animo por todo! Un abrazo muy fuerte lleno de cariño y un beso grande 😘❤
Me gustaLe gusta a 2 personas
Gracias, Ely. Sé que estás siempre ahí y percibo tu cariño.
Un abrazo enorme
Me gustaLe gusta a 1 persona
Sigue escribiendo. Yo estoy pasando por una situación muy parecida, y me tiene noqueado. Trato de seguir adelante con unos días mejores y otros peores, como éste. Así que tu entrada tiene todo el sentido. Totalmente hundido y, sin embargo, en pie, preparado para luchar.
Escribe. Es bueno para todos.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Siento mucho que estés pasando por algo así. Hay que tener mucha fuerza. Caer y levantarse, caer y levantarse. Es agotador pero no debemos rendirnos. Espero que tengas más días mejores que peores.
Te mando un abrazo enorme. Y gracias por comentar.
Me gustaMe gusta
Mi querida, Rosa. Escribe lo que quieras, te apetezca, lo que sientas, a mi no me aburre, ya sabes que yo no soy de escribir, ni poner comentarios, siempre estaré para leerte y espero que pronto puedas ver la vida, con esa mirada tuya tan especial. Un abrazo enorme y todo mi cariño.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Muchísimas gracias, Pilar. Sé que eres fiel lectora. Otro abrazo enorme para ti.
Me gustaMe gusta
Querida amiga, yo soy una fiel seguidora de tu blog y como tal, y como tu pides, te doy mi opinión. Yo creo que el blog está para escribir lo que se nos pasa por el alma y el corazón y la cabeza. Tu estado de los últimos tiempos hacen que las entradas sean más personales, no son lamentos, son estados de ánimo. Cuando te apetece, te sale, escribes historias de otra índole. Tu blog es tu válvula de escape, y la de los que te leemos porque nos ayuda, créeme. Pero ante todo y sobre todo, se tu, escribe lo que te apetezca. La vida es un tiovivo, y el blog también. Ya llegarán otras historias, hoy tocan estas. Pero ante todo y sobre todo, como te digo, permitete sentirte bien, liberarte, con lo que escribas, sea lo que sea. Un abrazo y gracias
Me gustaLe gusta a 2 personas
Gracias, Mol. Me alegra que digas que lo que escribo ayuda a alguien.
Ciertamente, los pocos fieles seguidores que comentáis por aquí lo hacéis siempre con tanto cariño que hace que valga la pena seguir escribiendo.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
No puedo estar mas de acuerdo con el comentario de Mol. Lo que escribimos refleja muchos estados de ánimo y es una manera de exteriorizar, lo que tú quieras o lo que tú necesites, porque cada momento precisa de ese «algo» diferenciador. Tus lectores no vamos a dejar de leerte porque trates de tal o cual tema. En mi caso valoro desde que te conocí por el blog, tu manera de escribir, de contarnos tus cosas, de mostrar tus sentimientos. Eso Rosa te hace grande dentro del dolor que sientes. Habrá días que no querrás hacerlo, el dolor puede ser agotador. Yo no necesito que seas la alegría de la huerta, probablemente no puedes serlo ahora, pero el hecho de que estés aquí abriéndote a nosotros ya dice mucho y bueno de tí. Cuenta conmigo aunque sea en la distancia. Y gracias por tu blog. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Mil gracias, Carlos. Los lectores como tú hacéis que este rincón sea como estar en casa. Percibo vuestro cariño y me siento arropada.
Gracias a ti por estar siempre ahí.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
A veces necesitamos escribir para hacer tangibles determinados sentimientos que no entendemos. La falta de inspiración es solo otro de esos sentimientos. En demasiadas ocasiones nos abruma la respuesta que tienen cada una de nuestras historias. Sentimos que tenemos que alimentar al lector, que se lo debemos, y ahí es cuando la mente nos juega una mala pasada y nace la obsesión por escribir algo, lo que sea, aunque no queramos hacerlo. Escribe con el corazón, desde el interior, de algo que necesites contar —como has hecho en esta entrada—. Préstale el corazón a tus personajes y tendrán alma. El lector, al empatizar con ellos, agradecerá compartir esas historias con personas, no con ideas. Leemos y escribimos para no sentirnos solos. Gracias por prestarnos tu alma.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ciertamente, intento escribir siempre con el corazón y pongo parte de mi alma en ello.
Gracias por comentar, Borja
Me gustaMe gusta
Querida amiga:
Creo que escribir es una forma de comunicarse. Todo lo que nos cuesta decir con palabras, lo recitamos en papel. Ello trae consigo que, algunas veces, sean textos más alegres y otras más tristes, pero lo que le importa al lector, a aquellos que te leemos, es tu forma de hablar, tu forma de sentir. Es muy valiente por tu parte usar el blog para contar tus experiencias personales. Es algo que, personalmente, no siempre hago y por ello tiendo a desaparecer eventualmente. Por ello te digo que sigas adelante, que sigas compartiendo aquello que sientes y piensas. Somos muchos los que nos sentimos acompañados e identificados por tus letras. Los que nos gusta leerte y sentir tus letras.
Como te dije al principio, escribir es comunicarse. Tú lo haces con todos y cada uno de tus textos y te digo que, por favor, sigue haciéndolo día tras día. Así también nos ayudas a los demás a seguir adelante.
Te mando el mayor de los abrazos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias por tus palabras, Fer.
No sé si es valiente o cobarde contar vivencias personales, pero reconozco que a veces me ayuda. Es una forma de echar fuera el dolor cuando se vuelve insoportable.
Seguiré escribiendo, no te preocupes. Y espero que me sigais leyendo.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Rosa, debes escribir lo que sientes en cada momento, de hecho yo creo que a los que te seguimos nos encanta tu manera de escribir y expresarte y, si lo que necesitas ahora es expresar tristeza, para eso estamos aquí, para leerte y apoyarte. Y cuando te apetezca escribir cosas más alegres (que lo harás, poco a poco, pero lo harás) aquí estaremos para reírnos con tus ocurrencias y disfrutar de su lectura. Yo llevo un tiempo sin poder escribir por circunstancias de la vida, pero sigo sin perderme una entrada de tu blog, por qué el tuyo y alguno más me han ayudado mucho en algún momento, ya sea por bonitas entradas o por entradas de aquellas que estas un rato riendo cada vez que te acuerdas de ellas. Mi humilde opinión es que, si a ti te apetece, no dejes de escribir. Un besazo muy fuerte.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Gracias, Silvia. Espero que pronto vuelvas a escribir también.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona